El fraude al seguro es un flagelo que crece
Se estima que un 20% de los siniestros denunciados pueden ser fraudulentos. Las cifras corresponden a un estudio realizado por FRISS, empresa focalizada 100% en la lucha contra el fraude en el sector asegurador.
Este es un flagelo que perjudica, no sólo a las compañías, sino a los asegurados, que tienen que soportar los incrementos en las primas, causados por la actuación delictiva de unos pocos.
Recordemos que el Código Penal argentino reprime al delito de fraude al seguro con prisión de dos a seis años
(Art. 174 Código Penal)
Los esquemas más comunes son:
- Robo de ruedas
- Denuncia falsa de robo de teléfono móvil
- Accidentes simulados
- Lesiones falsas
- No divulgación de información relevante
Asimismo, como consecuencia del incremento de esta actividad delictiva, las compañías de seguros vienen incrementando las acciones para la detección eficaz de estas acciones.
En ese sentido, el cruce de información es clave para la investigación de los siniestros denunciados. Un ejemplo, “una mujer denuncia lesiones por haberse caído en un supermercado. En el cruce de datos de los sistemas informáticos, vinculando el DNI de la denunciante, aparecían antecedentes similares, ya que la mujer había denunciado una lesión similar en los años anteriores con otras tres aseguradoras”.
Y los medios probatorios no se detienen allí. La pericia del celular del acusado de fraude al seguro es otro elemento utilizado por la Justicia para acreditar la comisión del delito.
En suma, el delito de fraude al segurno genera un importante impacto económico y financiero no sólo en la actividad, sino a todo el conjunto de la sociedad. El incremento en los juicios y las denuncias de falsos siniestros afecta a todos. Asegurados y Empleadores se ven afectados por costos directos e indirectos y poniendo en peligro los beneficios del sistema.